PROBABILIDADES
Ana y las probabilidades.
Ana no ha tenido una vida fácil, tampoco difícil, pero si esa pequeña inquietud de no saber dónde pisar bien con sus zapatos. Su madre, su padre, no se diferencian mucho de otros padres, solo que están divorciados. No tuvo hermanas con las que compartir su ropa, cotillear sobre chicos o convertirlas en modelos a seguir, tampoco tuvo hermanos que la protegieran, nadie que la vigilara, que la acosara por llegar tarde, porque nunca llegó tarde a ningún sitio, nadie que le invitara a dormir una noche, desnuda o con un pijama de ositos. No hubo mejor amiga, ni mejor amigo, pero si personas dispersas que pasaron por clases del colegio, del instituto o de la facultad, aún así no hay recuerdos para ninguna de ellas. Lo que si hubo fueron libros, cualquier cosa era apta de ser consultada, probada, corroborada, examinada y estudiada, enciclopedias gigantescas extraídas de la biblioteca del centro, de esa que queda cerca de casa y a la que nadie va, porque tampoco había en su casa, apenas algún libro que otro.
Ana es como cualquier otra chica, morena, con gafas, atractiva pero con poco partido, no se pinta, no baila, no sale por las noches, tampoco tiene un mundo imaginario, tampoco se pasa el dia encerrada, llorando. Ana es una chica corriente, común, alguien que quiere cambiar su vida, dar con conciencia ese paso que muchos dan sin darse cuenta: no quedarse sola. Y levantarse con esta idea en la cabeza sin saber que tu vida puede dar un giro hasta marearse. entonces, ¿existe alguna probabilidad?
Ana y las probabilidades.
Ana no ha tenido una vida fácil, tampoco difícil, pero si esa pequeña inquietud de no saber dónde pisar bien con sus zapatos. Su madre, su padre, no se diferencian mucho de otros padres, solo que están divorciados. No tuvo hermanas con las que compartir su ropa, cotillear sobre chicos o convertirlas en modelos a seguir, tampoco tuvo hermanos que la protegieran, nadie que la vigilara, que la acosara por llegar tarde, porque nunca llegó tarde a ningún sitio, nadie que le invitara a dormir una noche, desnuda o con un pijama de ositos. No hubo mejor amiga, ni mejor amigo, pero si personas dispersas que pasaron por clases del colegio, del instituto o de la facultad, aún así no hay recuerdos para ninguna de ellas. Lo que si hubo fueron libros, cualquier cosa era apta de ser consultada, probada, corroborada, examinada y estudiada, enciclopedias gigantescas extraídas de la biblioteca del centro, de esa que queda cerca de casa y a la que nadie va, porque tampoco había en su casa, apenas algún libro que otro.
Ana es como cualquier otra chica, morena, con gafas, atractiva pero con poco partido, no se pinta, no baila, no sale por las noches, tampoco tiene un mundo imaginario, tampoco se pasa el dia encerrada, llorando. Ana es una chica corriente, común, alguien que quiere cambiar su vida, dar con conciencia ese paso que muchos dan sin darse cuenta: no quedarse sola. Y levantarse con esta idea en la cabeza sin saber que tu vida puede dar un giro hasta marearse. entonces, ¿existe alguna probabilidad?
Ficha técnica
- Autor
- OLGA CARMONA-MARCOS PRADOS
- Edición
- Rústica
- Editorial
- RECERCA
- Formato
- 24x17
- Impresión
- B/N
- Páginas
- 58